“No puedo vivir sin ti!”
“Sin ti mi vida no tiene sentido”
“Eres lo más importante de mi vida”
“Sin ti me muero”
“Si me dejas me mato”
Te
parecen familiares estas afirmaciones? Seguramente es porque las escuchamos y
vemos en la televisión, las telenovelas, y series dramáticas, pero lejos de ser
románticas nos indican una relación no
sana.
Cuando
en una relación una persona comienza a dirigir los actos, los pensamientos y
los sentimientos de la otra las cosas no están bien, lastimosamente este tipo
de interacciones crean dependencia.
La dependencia
así como el amor también es un sentimiento vivido de a dos, y cada miembro de la pareja tiene el 50% de
responsabilidad de lo que sucede en la relación, por lo tanto los dos sufren,
los dos experimentan sentimientos negativos, y a los dos les dolerá mucho una
ruptura.
Es
un hecho que cuando nos enamoramos nos sentimos diferente, tanto física como
mentalmente, nuestros sentidos y nuestra mente comienzan a funcionar en una
manera no usual, y neurotransmisores como la dopamina la feniletilamina y la
adrenalina en realidad hacen que nos comportemos más en estado de alerta y con
más energía, síntomas que aparecen también en enfermedades mentales como los
trastornos maníaco-depresivos y los 'trastornos de ansiedad.
Desde este punto ya no parece todo positivo, pero mentalmente hay algunas consideraciones
que nos dan alertas para saber si mi relación puede caer en un juego de
dependencia.
Water
Riso realiza un excelente análisis de las relaciones en sus obras, para hablar
de estas luces rojas de aviso, voy a referirme a una de sus obras, “Ama y no
Sufras”.
Los
indicadores de que la relación se está convirtiendo en una burbuja impermeable no saludable possen características universales,
como lo describe Riso, que incluyen romanticismo crónico, euforia y
desvelo, y son los siguientes.
1. Idealización del ser amado.
Se refiere a engrandecer
las cualidades de la persona amada dejando de a un lado sus defectos, y pasando
por alto todo lo negativo, o volviéndose incapaz de criticar el objeto de
adoración.
2. Exclusividad y fidelidad absoluta.
El enamorado no
imagina la infidelidad de ninguna manera, pero exclusivamente porque llega a concebirse
como incapaz hablando biológicamente
“ mente y cuerpo
totalmente ocupados por la persona amada”,
no hay espacio disponible para nadie más.
"Sólo soy mujer
para él, sin él no soy nada"
3. Sentimientos intensos de apego y de atracción sexual.
Aunque la mayoría de las personas diferencian entre el
gozo afectivo y el placer sexual, el enamoramiento los unifica de manera
indiscriminada.
Deseo y afecto
se fusionan y las personas enamoradas piensan que el amor y el sexo siempre van juntos.
4. La convicción de que el amor será para siempre.
La idea de un
amor inmortal, eterno e indestructible , que a pesar de los problemas nada podrá separarlos.
En esta convicción
encaja perfectamente el pensamiento de que solo la muerte podrá destruir ese
infinito amor.
5. Pensamiento obsesivo sobre el ser amado.
Aunque los
pensamientos de la persona enamorada son repentinos y persistentes, no siempre
son molestos, más bien adoptan la forma de rumiación autogratificante según
Riso, un encantamiento del cuál el enamorado no quiere dejar de lado y de ellos
depende su estado de ánimo, así pues si son momentos felices sestará alegre y
si son tristes, estará sombrío y cabizbajo.
Parte de esos
pensamientos hipnóticos es la incapacidad para recordar lo malo, entonces
vienen frases como: “No puedo olvidarlo, recuerdo tantos buenos momentos que
pasamos juntos”
6. Deseo de unión y fusión total con el amado.
El deseo que
guía el enamoramiento va más allá de querer estar con la persona amada, lo que
exige el enamorado es "ser uno con el otro".
"Ser uno,
aunque seamos dos". Así no ha de parecerles extraño que la demostración
más grande de afecto sea el canibalismo, sí el devorar a la otra persona, nada
más extremo que esto pero a la vez nada más demostrativo, es ahí donde
comenzamos a perdernos en el otro, cuando no queremos diferenciarnos de él.
7. Disposición a correr cualquier riesgo para conservar
la relación.
Para los enamorados cualquier sacrificio es posible,
el descartar a los amigos, a la familia e incluso a sí mismo con tal de luchar
por ese amor, esta inconsciencia o incapacidad para ver las consecuencias
negativas se parece a las enfermedades mentales, el autor menciona…Esta falta de
autocontrol y la dificultad para tomar
decisiones
racionales fácilmente pueden convertirse en apego y configurar un cuadro mixto
de depresión y dependencia.
¿Pero entonces
como podemos reaccionar ante esta batalla entre neurotrasnmisores y
sentimientos que nos despegan un poco de la realidad?
El primer
paso es reconocer si estoy viviendo las señales de riesgo:
1. Idealización del ser amado.
2. Exclusividad y fidelidad absoluta.
3. Sentimientos intensos de apego y de atracción sexual.
4. La convicción de que el amor será para siempre.
5. Pensamiento obsesivo sobre el ser amado.
6. Deseo de unión y fusión total con el amado.
7. Disposición a correr cualquier riesgo para conservar
la relación.
Y luego de ello
está el racionalizar los sentimientos y controlar el deseo cuando sea
necesario, la próxima semana abordaremos el tema de cómo vivir el enamoramiento
sin dejar que este afecte a tu vida y a tu salud mental.
Gracias por sus
comentarios y sugerencias.
